lunes, 10 de mayo de 2010

Repatrian a dos acusados de matar capitán .


Ramón Cruz Benzán
Santo Domingo/Listindiario

Fueron repatriados ayer desde Holanda Luis Alfonso Reyes (Luis la Perra) y Raúl Florentino Báez Medina (El Mayimbe), dos de los más buscados por las autoridades dominicanas por su implicación en hechos delictivos, incluyendo la muerte de un capitán del Ejército.

Ambos fueron capturados en esa nación por tener orden de arresto internacional.

A su llegada al país fueron trasladados a la sede central de la Policía Nacional bajo estrictas medida de seguridad.

Luis la Perra y El Mayimbe se declararon inocentes de los cargos en su contra, tras sostener que son inciertos e infundados, y precisaron que demostrarán su inocencia en los tribunales.

El vuelo en que venían los imputados estaba previsto para llegar las 9:00 de la noche del pasado sábado por el Aeropuerto de Punta Cana, pero el avión tuvo un percance debido a un volcán que ha trastornado el tráfico aéreo en Europa. Llegó ayer a las 2:00 de la madrugada.

El asesinato
Además de la muerte de Víctor Alfonso Reyes Cruz, hecho ocurrido frente al centro de diversión Eagle Sport Bar, ubicado en el kilómetro 5 de la autopista San Isidro, municipio Santo Domingo Este, los detenidos están siendo investigados con relación al tráfico de euros y por lavado de activos.

Los prófugos fueron traídos al país desde Holanda por agentes especiales de esa nación, quienes hicieron su formal entrega a miembros de la Policía, adscritos a la Interpol dominicana.

El vocero de la Policía, general Nelson Rosario, dijo que los acusados fueron remitidos al Departamento de Homicidios y de allí serán trasladados a la fiscalía de la provincia Santo Domingo, a fin de que se les conozcan medidas de coerción en torno al asesinato de Reyes Cruz la noche del 19 de febrero.

Una versión de ese hecho indica que Reyes Cruz fue sacado por un desconocido del referido centro de diversión, donde se encontraba compartiendo con su amigo, Amaury Rosario Rodríguez.

Luego el desconocido sacó una pistola y disparó sin mediar palabras en repetidas ocasiones, escapando del lugar en una jeepeta Mitsubishi Montero y el carro Honda Accord, propiedad de Jorge Carvajal, el cual fue dejado abandonado en la avenida Charles de Gaulle, próximo a la avenida Ecológica, donde se ocupó una pistola Taurus 9 milímetros, a nombre de Báez Medina, dos celulares y documentos.

Al profundizar las investigaciones del hecho, la Policía estableció que se trató de un ajuste de cuentas ante un tumbe de más de 100 mil euros que habían sido traídos al país desde Holanda por una mujer, contratada por una red internacional que resultó desmantelada luego del hecho de sangre.

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