NUEVA YORK._ Legisladores estatales denuncian que negocios y vendedores callejeros en el Alto Manhattan, el barrio con mayor población dominicana de Estados Unidos y el mundo, expenden ilegalmente la potente bebida “Nutcraker” a menores del vecindario. También, medios locales como el tabloide NY Daily News, se han sumado a la campaña de denuncias. Ayer, el senador y el asambleísta estatal Eric Schneiderman y Adriano Espaillat, advirtieron que someterán una legislación fuerte para castigar a quienes se aprovechan del gusto que tienen los adolescentes por la bebida para vendérsela fuera de la ley. El concejal Ydanis Rodríguez por su parte, también se unió a las denuncias.
El “Nutcracker” es un zumo alcohólico hecho a base de combinaciones de varias clases de alcohol barato y frutas, que se convierte en una especie de coctel molotov y produce efectos alucinantes, generando vómitos, mareos y hasta ataques entre quienes se emborrachan consumiéndolo.
Negocios como bodegas, salones de belleza, algunos restaurantes y discotecas, ofrecen la bebida a los menores y un vaso de 16 onzas, cuesta en la calle entre $5 a $10 dólares, dependiendo de si es el llamado “Nemo” frisado o “Cascanueces” en bebida líquida. El sabor del “Nutcracker” es muy atractivo para adolescentes y adultos, pero son los primeros, quienes tienen la preferencia por ingerirlo.
Especialmente en el verano, se ve a muchas personas, principalmente lindas jovencitas, ofertando la bebida en las calles del Alto Manhattan, la que cargan en carritos de los usados para hacer compras en los supermercados. Entre los alcoholes con los que se mezcla el jugo, figuran vodka, rones, tequila blanco y escocés.
Los jóvenes, por ser ilegal la venta, no necesitan identificación para comprar el licor y algunos consideran que están dando el primer paso para envolverse en el vicio del alcohol. Además de las citadas combinaciones, otros “fabricantes” ligan piña colada y ponen sabor a caramelo al “Nutcracker”.
Otro de los que se ha unido a las denuncias es el doctor Peter Provet, director del Centro de Rehabilitación de Alcohólicos y Drogadictos Odyssey, quien afirma que la venta, se está convirtiendo en un fenómeno y necesita ser enfrentada con una drástica respuesta de la aplicación de la ley.
En algunas tiendas de licores del populoso barrio dominicano y en Harlem, se venden imitaciones de la bebida por $25 dólares la botella. Además del Alto Manhattan, el “Nutcracker”, se vende en áreas de El Bronx
El Daily News dijo en un reportaje sobre la situación que hasta ahora, ninguno de los duelos de los establecimientos en los que se vende la bebida, ha sido citado o multado por la Autoridad de Licores. Esos negocios, generalmente, tienen licencias para vender comestibles y cervezas.
Raperos tan conocidos como Fat Joe, son adictos a la bebida. Para la policía, la venta de “Nutcracker” no tiene prioridad para ser combatida por la uniformada en comparación a crímenes importantes que se cometen en la ciudad. “Tenemos muchas otros problemas importantes en los que debemos concentrarnos como son el narcotráfico y las pandillas”, dijo un portavoz policial al ser cuestionado al respecto.
“No tenemos tiempo para salir a arrestar a quienes venden o consumen Nutcracker”, agregó el detective. Hasta el momento, si alguien es arrestado vendiendo la bebida, sólo se le da una orden de comparecencia a la corte por venta ilegal de alcohol. Las multas varían desde $150 a $1,000 dólares.
La bebida es vendida también en furgonetas que se estacionan en distintas calles del Alto Manhattan y lo hacen de forma muy discreta. El asambleísta Espaillat calificó de “atrocidad” la venta a menores. El asambleísta dominicano cree que narcotraficantes, podrían estar detrás de ese negocio por las débiles sanciones penales que se imponen por ahora. “Para ellos, es un negocio mucho más rentable que el de las drogas, pero impediremos que se salgan con la suya”.
Adelantó que él y varios de sus colegas propondrán una ley de cero tolerancia para tratar de frenar la venta. El concejal Ydanis Rodríguez, dijo que someterá una resolución en el Concejo Municipal para que las autoridades comiencen a investigar el asunto y apoyar la posición del asambleísta y el senador.
Espaillat indicó que está esperanzando en que con las denuncias que se están haciendo, sus homólogos en la Asamblea Estatal, puedan asumir el tema durante el presente período de sesiones.
Autor: Miguel Cruz Tejada
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