La deuda corresponde al pago de cubicaciones de calles, carreteras y escuelas construidas -algunas aún paralizadas- en todo el país, sobre todo en Santo Domingo y Santiago.
Payano dijo que sólo un reducido grupo de 20 ingenieros se beneficia de la asignación de las obras gubernamentales.
Al pronunciar un discurso en la apertura del primer seminario internacional sobre Sismología Sismo-Resistente, que inició ayer en la la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), pidió al presidente Leonel Fernández que tome en cuenta la situación denunciada, para que las obras del Estado se distribuyan de forma equitativa.
“Las obras del Estado deben ser distribuidas entre todos, entre medianos y pequeños contratistas que son los afectados por el problema”, sostuvo.
Asimismo, sugirió al Gobierno que los recursos provenientes de los préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI) sean utilizados para gastos de inversión, sobre todo en infraestructuras que garanticen empleos y mejoren sustancialmente la calidad de vida de la población.
Payano se quejó de que los funcionarios no responden comunicaciones de sugerencia.
El presidente de la regional Norte del CODIA, Silvio Durán, pronunció las palabras de apertura del evento internacional y propuso al Gobierno que haga un consenso de un paquete de obras de interés social, para que las mismas sean sorteadas entre los más de tres mil miembros de la entidad profesional, que muchas veces no obtienen ninguna obra.
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