Es muy frecuente que nuestros pies sufran de durezas y callosidades, debido a la constante presión que tienen que hacer durante largas jornadas de trabajo. Hoy queremos aconsejarte algunos trucos caseros para que puedas aliviar un poco este mal, que además de ser doloroso, resulta ser también un grave problema de estética.
Nunca rebajes los callos con navajas, pues podrías causarte graves heridas o infecciones de consideración. También debes tener cuidado con algunos medicamentos que se ofrecen de manera libre y que promocionan como anticallos, pues estos pueden contener ácidos que afectan gravemente los tejidos de nuestra piel.
Realiza baños de pies con agua con vinagre
También te recomendamos que tomes un diente de ajo y una cucharada pequeña de aceite de oliva, mézclalos hasta que resulte de ella una sustancia cremosa y espesa. Aplica esto en las zonas donde tengas las callosidades y deja actuar durante toda la noche. En la mañana lava bien tus pies y seca suavemente. Recuerda que para casos extremos debes visitar a los especialistas para que no dejes avanzar este tipo de males.
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