EFE
Ciudad del Vaticano
El papa Benedicto XVI lamentó hoy que en los mensajes dirigidos a los jóvenes se "exalte la incertidumbre, la movilidad y la volatilidad, aspectos que reflejan una cultura indecisa sobre los valores de fondo y los principios de base sobre los que orientar y regular" sus vidas.
El Papa así lo manifestó durante el tradicional rezo del Ángelus dominical, que celebró desde el balcón de la residencia de los papas en Castel Gandolfo, al sur de Roma, donde pasa sus vacaciones.
Benedicto XVI quiso profundizar sobre el contenido del mensaje que ha escogido transmitir a los jóvenes con motivo de la XXVI Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en el Madrid del 16 al 21 de agosto de 2011 y que fue difundido esta semana.
El Pontífice admitió que se trata de un mensaje "a contracorriente" puesto que éste se propone bajo el lema de "Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe", frente a la "exaltación de la incertidumbre, de la movilidad y de la volatilidad" que predomina hoy en día.
Consideró que éstos últimos son "aspectos que reflejan una cultura indecisa sobre los valores de fondo, los principios sobre los cuales orientare y regular la propia vida".
"Sé bien que cada persona está llamada a hacer de nuevo el camino de descubrimiento del sentido de la vida. Precisamente por esto he querido volver a proponer un mensaje que, según el estilo bíblico evoca las imágenes del árbol y de la casa", subrayó Joseph Ratzinger.
Y precisó: "El joven es como un árbol en crecimiento, para desarrollarse bien necesita raíces profundas que lo tengan bien plantado al suelo cuando deba afrontar tempestades de viento. De igual modo un edificio en construcción necesita bases sólidas para que la casa sea sólida y segura".
Benedicto XVI explicó que estos conceptos se encuentran en las expresiones "en Cristo" y "en la fe" de su mensaje, mientras recalcó que "la plena estabilidad de las personas y su estabilidad interior tienen un fundamento en la relación con Dios".
Asimismo, Joseph Ratzinger reiteró tras el Ángelus en su saludo a los peregrinos de lengua española su llamada a leer el Mensaje que ha firmado con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud para que muchos jóvenes puedan encontrarse en Madrid el próximo agosto.
Ciudad del Vaticano
El papa Benedicto XVI lamentó hoy que en los mensajes dirigidos a los jóvenes se "exalte la incertidumbre, la movilidad y la volatilidad, aspectos que reflejan una cultura indecisa sobre los valores de fondo y los principios de base sobre los que orientar y regular" sus vidas.
El Papa así lo manifestó durante el tradicional rezo del Ángelus dominical, que celebró desde el balcón de la residencia de los papas en Castel Gandolfo, al sur de Roma, donde pasa sus vacaciones.
Benedicto XVI quiso profundizar sobre el contenido del mensaje que ha escogido transmitir a los jóvenes con motivo de la XXVI Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en el Madrid del 16 al 21 de agosto de 2011 y que fue difundido esta semana.
El Pontífice admitió que se trata de un mensaje "a contracorriente" puesto que éste se propone bajo el lema de "Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe", frente a la "exaltación de la incertidumbre, de la movilidad y de la volatilidad" que predomina hoy en día.
Consideró que éstos últimos son "aspectos que reflejan una cultura indecisa sobre los valores de fondo, los principios sobre los cuales orientare y regular la propia vida".
"Sé bien que cada persona está llamada a hacer de nuevo el camino de descubrimiento del sentido de la vida. Precisamente por esto he querido volver a proponer un mensaje que, según el estilo bíblico evoca las imágenes del árbol y de la casa", subrayó Joseph Ratzinger.
Y precisó: "El joven es como un árbol en crecimiento, para desarrollarse bien necesita raíces profundas que lo tengan bien plantado al suelo cuando deba afrontar tempestades de viento. De igual modo un edificio en construcción necesita bases sólidas para que la casa sea sólida y segura".
Benedicto XVI explicó que estos conceptos se encuentran en las expresiones "en Cristo" y "en la fe" de su mensaje, mientras recalcó que "la plena estabilidad de las personas y su estabilidad interior tienen un fundamento en la relación con Dios".
Asimismo, Joseph Ratzinger reiteró tras el Ángelus en su saludo a los peregrinos de lengua española su llamada a leer el Mensaje que ha firmado con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud para que muchos jóvenes puedan encontrarse en Madrid el próximo agosto.
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