Una mamá limpia tendrá hijos limpios. Lo que se aprende en casa nunca se pierde. Todo empieza en casa.
Cuando es bebé tú eres la responsable de que tu hijo esté bien limpio, pero conforme vaya haciéndose más grande tu hijo debe empezar a aprender las primeras lecciones de higiene y cuidado personal para que las ponga en práctica por si solo más adelante.
Mientras que su capacidad para coordinar movimientos aumenta, tu hijo puede empezar a frotarse o enjuagarse.
Luego enséñale a lavarse la cara en las mañanas, a lavarse los dientes (es bueno que empiece a partir de los 3 años), a lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño y de jugar.
Para que tu hijo aprenda bien estas cosas tú debes darle el ejemplo. Cuando haya que lavarse las manos, lávate las manos con él y explícale paso a paso cómo y por qué debe hacerlo.
Empieza a comprarle sus artículo personal como un cepillo infantil, un vasito para enjuagarse y toallas de manos llamativas que le den ganas de usarlas.
Una manera divertida de enseñarle higiene a tu hijo es a través del juego. Cómprale juguetes que lo acompañen en su higiene como el famoso patito de hule, o deja que lleve a su muñeco favorito al baño.Fuente:bebes.net
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