Impactodeportivo-Hasta Albert Pujols no es perfecto todos los días.
Claro, ningún pelotero ni se acerca a Pujols, ya que el dominicano no sólo pone el estándar en producción ofensiva, sino también el jugar a un nivel tan alto con tanta consistencia.
Sin embargo, el toletero de los Cardenales pasa por el slump ocasional, y en días pasados estuvo lidiando con una gripe que le quitó algo de fuerza.
"Es parte del juego que tiene que pasar para mantenerte con hambre, y tienes que hacer los ajustes", dijo Pujols.
"Eso es lo principal. Todos somos humanos y tenemos que aprender. No podemos ser perfectos, aunque lo intentemos."
En lo que ha mejorado Pujols en años recientes es la habilidad de manejar eso cuando no ha alcanzado las metas.
"Aprendí tanto, que puedes frustrarte y de vez en cuando estrellar un bate o un casco", dijo Pujols. "Es parte de ser competitivo. Pero después de bañarte, sales de aquí y no hay que pensar mucho en eso. Eso es algo en que he crecido en los últimos años. Así es."
Pujols, quien conectó su jonrón número 23 de la temporada en el primer partido de la serie entre los Cardenales y los Tigres, y lleva cinco bambinazos en sus últimos cinco choques. Recientemente llegó a los 1,600 hits de por vida y pronto llegará las 1,000 anotadas.
En días pasados también pasó la marca de 3,000 bases alcanzadas.
Los marcas más llamativas parecen estar lejos, pero al mismo tiempo Pujols se acerca con cada partido.
"No parece que lleve tanto tiempo (en el béisbol)", dijo Pujols. "Pero no pienso en eso. Ustedes (los medios) lo hacen bien. No me gusta perderme en los números, porque sé lo que puedo hacer si sigo en salud. Cuando termine mi carrera, ahí sí podré mirar bien los números. Pero ahora mismo no se puede hacer eso.
"No puedes concentrarte en lo que bateas durante la temporada ni nada de eso. Porque al final de la temporada, ahí es que verás los resultados. Obviamente quieren continuar teniendo éxito hasta el último día de la temporada, pero faltan tantos partidos y hay tantos baches...no demasiados, espera uno. Simplemente hay que hacer el ajuste y tratar de ser consistente con eso. Es lo que trato de hacer todos los días."
En esta temporada no ha tenido que hacer muchos ajustes. Con la excepción de dos pequeñas malas rachas, pero ninguna duró más de una semana. Hasta para el estándar de Pujols, ha sido una campaña excelente, con promedio de .326, 23 cuadrangulares y 58 empujadas, además de un slugging de .701 y porcentaje de embasarse de .446.
El dominicano habló un poco de lo que hace cuando entre en mala racha.
"Puede haber un día, como lo fue al principio de mayo, cuando tuve dificultades para ver la bola con el sol, y quise tomar unas prácticas de bateo extra", expresó. "Lo hice durante par de días. En eso no quise estar apresurado, comparado con estar en mi grupo y tener que dar muchos swings durante 10 minutos, y no sacarle mucho provecho.
"Hago eso desde que estaba en liga menor, cuando hay un día en que siento que quiero tomar prácticas extras de bateo. Lo hice en Pittsburgh, lo hice en casa. Simplemente quiero trabajar y relajarme y hablar y ya tener una idea. Tengo 30 minutos y puedo hacer lo que quiera, en vez de 10 minutos para hacer todo rápido y no sacarle provecho. Cuando tomo mis swings, prefiero tomar 20 o 30, en vez de 50 a 100 y no aprovechar nada."
Ha dado resultados. Rompió una racha de tres juegos seguidos sin dar hit en mayo con cuadrangulares en partidos consecutivos. Terminó con una mala racha en junio con cinco jonrones y sus últimos cinco partidos. Lo sigue haciendo, impresionando a todos.
Claro, ningún pelotero ni se acerca a Pujols, ya que el dominicano no sólo pone el estándar en producción ofensiva, sino también el jugar a un nivel tan alto con tanta consistencia.
Sin embargo, el toletero de los Cardenales pasa por el slump ocasional, y en días pasados estuvo lidiando con una gripe que le quitó algo de fuerza.
"Es parte del juego que tiene que pasar para mantenerte con hambre, y tienes que hacer los ajustes", dijo Pujols.
"Eso es lo principal. Todos somos humanos y tenemos que aprender. No podemos ser perfectos, aunque lo intentemos."
En lo que ha mejorado Pujols en años recientes es la habilidad de manejar eso cuando no ha alcanzado las metas.
"Aprendí tanto, que puedes frustrarte y de vez en cuando estrellar un bate o un casco", dijo Pujols. "Es parte de ser competitivo. Pero después de bañarte, sales de aquí y no hay que pensar mucho en eso. Eso es algo en que he crecido en los últimos años. Así es."
Pujols, quien conectó su jonrón número 23 de la temporada en el primer partido de la serie entre los Cardenales y los Tigres, y lleva cinco bambinazos en sus últimos cinco choques. Recientemente llegó a los 1,600 hits de por vida y pronto llegará las 1,000 anotadas.
En días pasados también pasó la marca de 3,000 bases alcanzadas.
Los marcas más llamativas parecen estar lejos, pero al mismo tiempo Pujols se acerca con cada partido.
"No parece que lleve tanto tiempo (en el béisbol)", dijo Pujols. "Pero no pienso en eso. Ustedes (los medios) lo hacen bien. No me gusta perderme en los números, porque sé lo que puedo hacer si sigo en salud. Cuando termine mi carrera, ahí sí podré mirar bien los números. Pero ahora mismo no se puede hacer eso.
"No puedes concentrarte en lo que bateas durante la temporada ni nada de eso. Porque al final de la temporada, ahí es que verás los resultados. Obviamente quieren continuar teniendo éxito hasta el último día de la temporada, pero faltan tantos partidos y hay tantos baches...no demasiados, espera uno. Simplemente hay que hacer el ajuste y tratar de ser consistente con eso. Es lo que trato de hacer todos los días."
En esta temporada no ha tenido que hacer muchos ajustes. Con la excepción de dos pequeñas malas rachas, pero ninguna duró más de una semana. Hasta para el estándar de Pujols, ha sido una campaña excelente, con promedio de .326, 23 cuadrangulares y 58 empujadas, además de un slugging de .701 y porcentaje de embasarse de .446.
El dominicano habló un poco de lo que hace cuando entre en mala racha.
"Puede haber un día, como lo fue al principio de mayo, cuando tuve dificultades para ver la bola con el sol, y quise tomar unas prácticas de bateo extra", expresó. "Lo hice durante par de días. En eso no quise estar apresurado, comparado con estar en mi grupo y tener que dar muchos swings durante 10 minutos, y no sacarle mucho provecho.
"Hago eso desde que estaba en liga menor, cuando hay un día en que siento que quiero tomar prácticas extras de bateo. Lo hice en Pittsburgh, lo hice en casa. Simplemente quiero trabajar y relajarme y hablar y ya tener una idea. Tengo 30 minutos y puedo hacer lo que quiera, en vez de 10 minutos para hacer todo rápido y no sacarle provecho. Cuando tomo mis swings, prefiero tomar 20 o 30, en vez de 50 a 100 y no aprovechar nada."
Ha dado resultados. Rompió una racha de tres juegos seguidos sin dar hit en mayo con cuadrangulares en partidos consecutivos. Terminó con una mala racha en junio con cinco jonrones y sus últimos cinco partidos. Lo sigue haciendo, impresionando a todos.
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