Carolina Alcántara Vizcaíno y Rosa Iris Jiménez, dos jóvenes dominicanas que viajaron a San Martín con un contrato para trabajar como domésticas, denunciaron haber sido secuestradas en un prostíbulo de esa isla, donde fueron severamente torturadas sacándoles las uñas y propinándoles golpes por negarse a sostener relaciones sexuales con los clientes del negocio.
Según Vizcaíno, de 28 años, e Iris Jiménez Sánchez, de 21, declararon a las autoridades de Migración del Aeropuerto de Las Américas, que durante ocho días fueron mantenidas secuestradas en el negocio de mala muerte, donde fueron golpeadas y sometidas a torturas por empleados del prostíbulo.
Precisan que escaparon del lugar, pero precisan que allí aún permanecen encerradas otras nueve compatriotas que viajaron con ellas y que también estarían siendo maltratadas porque se niegan a sostener relaciones sexuales con los parroquianos. Las criollas, nativas de Puerto Plata, dijeron que salieron del país el día 8 de este mes.
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