El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez defendió ayer la integridad de la juventud del barrio Capotillo que lucha y se esfuerza para salir adelante y labrarse un futuro distinto al que viven otros que han sido atrapados por las drogas y la delincuencia.
“Nadie tiene derecho a decir que Capotillo está perdido, sin conocer la conducta, la calidad y la capacidad de servicio de tantos jóvenes que se sacrifican para estudiar y mantener su integridad en este barrio”, dijo.
El Arzobispo de Santo Domingo se refirió a lo “bueno y sano” de la juventud de Capotillo durante una homilía que pronunció previo a la ceremonia de confirmación en la fe católica de más de 50 jóvenes de la parroquia Santa Clara, de Capotillo, uno de los barrios más convulsionados socialmente de la capital dominicana.
El Cardenal exhortó al grupo de los confirmados y numerosos amigos y familiares que asistieron a la ceremonia a que se mantengan firmes en la fe en la que se confirmaban, respetando los principios de la iglesia, a sus padres y fomentando los valores cristianos.
Sobre las lecturas del día, especialmente el evangelio en que Pedro hace una confesión mesiática de Jesús, en respuesta a las preguntas que le hizo sobre sí mismo, el Cardenal dijo a los jóvenes que pidan siempre la luz del Espíritu Santo para que los ayude a discernir y vivir convencidos de que Jesús es el Mesías, el enviado de Dios, como lo confesó Pedro.
El grupo de jóvenes de uno y otro sexo fueron preparados para recibir el sacramento de la confirmación por el sacerdote Wilfredo Montaño, párroco de la iglesia de Santa Clara, y los catequistas de esa comunidad. La mayoría de los jóvenes son estudiantes de escuelas públicas del barrio y centros de educación especializada de la Iglesia Católica.
Formación moral
En la parroquia Santa Clara del populoso barrio de Capotillo asisten cientos de jóvenes a distintas actividades y participan en grupos de formación moral y humana, actividades sociales y culturales, deportes, asistencia social, catequesis, y reciben además, enseñanzas de escuela básica y en otros niveles.
Este fue la duodécima ceremonia de confirmación que realiza el Arzobispo Metropollitano de Santo Domingo en distintas parroquias, afirmando en la fe católica a más de mil jóvenes y adultos durante los últimos meses.
Los obispos auxiliares realizan también con mucha frecuencia ceremonias de confirmaciones, que además pueden presidir sacerdotes autorizados por un permiso especial del Arzobispo.
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