Monterrey/EFE — Una trifulca entre soldados y policías en el estado mexicano de Nuevo León, en el norte del país, durante la cual se registraron varios disparos al aire dejó un saldo de siete agentes lesionados a golpes, informó ayer la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
El incidente se produjo de madrugada cuando un contingente de efectivos del Ejército acudió a una zona en la que estaban concentrados dos coches patrulla de la policía estatal y diez de la policía de Escobedo, municipio de la zona metropolitana de Monterrey, capital de Nuevo León.
Según una denuncia anónima, los agentes se encontraban en el lugar supuestamente para recibir dinero de miembros del crimen organizado, punto que no ha sido confirmado oficialmente. Al llegar los militares, un agente en aparente estado de ebriedad los encaró y en medio de la tensión varios policías estatales y municipales abrieron fuego al aire.
Seguridad Pública sostiene que la trifulca llegó hasta los golpes y que un policía estatal y seis municipales resultaron con heridas leves.
Los soldados recibieron la orden de retirarse pero minutos después fueron alcanzados en otro punto por una dece- na de coches patrullas de Seguridad Pú- blica en el barrio Ciudad Solidaridad.
A estos se sumaron después unos sesenta vehículos de la policía municipal de Escobedo y de San Nicolás y Santa Catarina, otros municipios de los alrededores de Monterrey, así como agentes estatales, que rodearon y encañonaron a los soldados, cerca de setenta, durante aproximadamente una hora. A gritos, los policías advirtieron a los militares de que ya están "cansados de los abusos" y de las constantes revisiones a las que son sometidos por el Ejército, institución que junto a la Policía Federal encabeza la lucha antidrogas en el país.Finalmente, los policías dejaron ir a los militares con el compromiso de la Séptima Zona Militar, que opera en esa área, de que los soldados que agredan a agentes serán sometidos a la justicia militar.
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