El cura, de 63 años, que recibirá sentencia el 12 de enero podría ser condenado a 15 años de cárcel.
El reverendo católico romano, fue presentado en la mañana de ayer en la Corte Criminal del condado, donde admitió que mientras estaba al frente de la Iglesia de los Dolores, se robó la alta suma que estaba destinada a operaciones de la congregación y a cientos de víctimas del huracán Katrina.
Su declaración de culpabilidad, es parte de una negociación con los fiscales, dentro de la que podría servir menos de la mitad de los 15 años en la cárcel y otros 5 en libertad condicional. La iglesia, está situada en la avenida Mamaroneck y el sacerdote ladrón la dirigió desde 1991.
Declaró que durante 6 años, se robó el dinero, incluyendo las donaciones a las víctimas de Katrina y lo utilizó en gastos personales, actividades recreativas y juegos de azar.
El juez de la corte en Weschester, Jeffrey A. Cohen, explicó que había aceptado el acuerdo de Dunne con la fiscalía, sólo porque las víctimas, merecen ser restituidas. El trato, también obliga al cura a reponer el dinero robado a la arquidiócesis de Nueva York. El abogado del acusado, Richard Ferrante, rehusó detallar cómo el cura va a restituir la suma.
La corte además lo sometió a un programa de tratamiento por su adicción al juego y se mantiene en un programa ambulatorio. La investigación comenzó en el otoño del 2008, cuando personal de la iglesia, advirtieron que las entradas en donaciones a la parroquia, estaban siendo cobradas en sus cuentas.
La oficina del fiscal del distrito, tras ser notificada, determinó que los robos del cura comenzaron en el 2002 y desde ese año, la iglesia recibió contribuciones de los feligreses por más de tres millones de dólares para construir un anexo y ampliar la estructura, que incluyen nuevas oficinas para la rectoría y la sala del centro parroquial.
El portavoz de la iglesia católica en Nueva York Joseph Zwilling, dijo que las pérdidas habían sido sometidas a las compañías de seguros y expresó su agradecimiento a la fiscalía y a la corte por el buen manejo dado al caso.
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