Fuente:AOLnoticias.-La deportación de Claudio Molina se producirá en cuestión de horas y su
familia junto a varios activistas pro inmigrantes luchan contra reloj
para impedirlo.
En poco menos de dos meses la vida de los Molina Ghilardi, una familia
inmigrante procedente de Mendoza, Argentina cambió abruptamente. El
pasado 3 de marzo Claudio Molina esperaba en su carro a que su familia
pasara a recogerlo cuando de pronto empezó a vomitar y sufrir
convulsiones.
El empleado de una tienda localizada al frente del estacionamiento al
ver lo que pasaba llamó al menos tres veces a los servicios de
emergencia pidiendo una ambulancia para que llevaran a Claudio a un
hospital. Pasaron unos 30 minutos y la ambulancia nunca llegó hasta que
la Policía se hizo presente. Minutos después Molina era arrestado.
Lo grave del caso es que la Policía de la ciudad del Brentwood, en el
suburbio de Long Island, Nueva York puso de inmediato a Molina en manos
de las autoridades de inmigración (ICE) y su familia sostiene que su
único delito consistió en haber llamado a una ambulancia.
"Claudio
es un hombre enfermo, tiene diabetes tipo 2 y recientemente recibió
nuevos medicamentos, posiblemente eso fue lo que le afectó", dijo a AOL
Latino Cristina Ghilardi la esposa de Molina, quien confirmó que el ICE
le notificó que sería deportado hoy en uno de los vuelos que van a
Argentina.
Con el pequeño Mathew de 4 años en sus brazos y visiblemente nerviosa
Cristina, su hija Ludmila y al menos 20 personas se apostaron ayer en
vigilia frente al cuartel de policía de Brentwood donde inicialmente
Claudio Molina estuvo arrestado, luego fue trasladado a la cárcel de
inmigración de Newark, Nueva Jersey.
"Por Dios tengan compasión, Claudio es quien sostiene a la familia,
somos gente honesta. Estamos aquí buscando un futuro mejor para nuestros
hijos", clama Cristina.
"Estamos viviendo en carne propia el drama de miles de familias que son
separadas. Queremos a este país y respetamos sus leyes sólo venimos a
trabajar", insiste la afligida mujer.
"El trabajo de la Policía deber ser proteger y ayudar a la comunidad. Lo
que le hicieron con Claudio fue algo injusto e inhumano. No debió de
suceder. El necesitó de ayuda médica y en su lugar fue arrestado", dijo
Osman Canales, director de Long Island Immigrant Students Advocates
(LIISA).
Canales destacó que los policías deben parar de actuar como agentes de
inmigración y tener mejor relación con la comunidad inmigrante.
"Esta acción crea terror y desconfianza. Personas inocentes inocente
como Claudio no deben ser tratados así por el simple hecho de ser
indocumentado. Esta práctica tiene que parar en condado de Suffolk y en
todas partes", reiteró Canales.
"Creo que se ha actuado con mala fe. La Policía todo lo ha hecho muy
rápido. Esto sólo lo hacen con nosotros los hispanos. Como puede haber
tanta insensibilidad para destruir una familia" dijo Rosa González, una
estudiante presente en la vigilia.
El departamento de Policía de Brentwood desestimó emitir algún
comentario sobre Claudio y sólo ratificó que su caso estaba en manos de
las autoridades de inmigración.
De
su parte Ludmila, una estudiante que cursa el tercer año de Sicología
en el Suffolk Community College luce aun más confundida.
"No sé qué vamos hacer sin mi padre. No entiendo, cómo pueden separar a
nuestra familia, es una tragedia terrible", dijo Ludmila.
Según Ludmila, la Policía en su informe dijo que arrestó a su padre por
estar intoxicado. "El no estaba conduciendo, ni siquiera estaba
encendido el coche, estaba estacionado esperándonos en el
estacionamiento. Tenemos testigos de eso".
En busca de un mejor porvenir Claudio Molina vino a Estados Unidos en el
1996 y en 2001 se juntó el resto de la familia, su esposa Cristina y
Ludmila, el pequeño Mathew nació aquí.
"Mi hijo llora constantemente y pregunta por su padre. Le digo que está
trabajando y que pronto va a venir, no sé cómo le explicaré si de pronto
Claudio es deportado. Por justicia divina, no nos separen" insiste
Cristina.
Ludmila tenía 9 años cuando llegó y hoy pese a no tener documentos, con
el esfuerzo de sus padres ha logrado empezar sus estudios universitarios
y es una activista pro DREAM Act.
"Hay tantos chicos como yo que fuimos traídos por nuestros padres con el
único sueño de salir adelante. Mi padre es el sostén del hogar y quiero
seguir estudiando" agrega Ludmila.
Las organizaciones DREAM Activist Undocumented Students & Resource
Network y New York State Youth Leadership Council iniciaron una cruzada a
través de cartas y llamadas al ICE y al Departamento de Seguridad
Interna para impedir la deportación de Claudio Molina, cuyo caso está
registrado bajo el código A# 095-472-313.
martes, 24 de abril de 2012
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