El presunto delincuente llegó a la tienda simulando que era un cliente procediendo a encañonar al propietario del negocio y a una empleada, olbligándolos a entregar el dinero producto de la venta, así como prendas de vestir.
Tras cometer la fechoría huyó, pero los afectados dieron la voz de alarma a los vecinos que iniciaron una persecución en su contra.
Pobladores portando palos, armas blancas y de fuego, lo persiguieron y al darle alcance lo lincharon en presencia de niños y adultos, incluyendo de camarógrafos.
Uno de los que perseguían al desconocido linchado le hizo un disparo en el pecho, provocando que el ladrón cayera al suelo.
De acuerdo a testigos presenciales el moribundo pedía insistentemente agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario