Un centro nocturno quedó totalmente destruido en tanto que una guardería tuvo severos daños ante la potente explosión ocurrida el viernes en Springfield, una de las ciudades más grandes de Nueva Inglaterra.
Ninguna persona perdió la vida en estos hechos.
Los investigadores intentaban el sábado determinar que causó la explosión que pudo escucharse a kilómetros (millas) de distancia, la cual espació fragmentos hasta varias cuadras y dejó un enorme hoyo en el suelo donde se ubicaba el Club Scores Gentleman en un edificio de ladrillo de varios pisos.
Una hora antes de la explosión, las autoridades habían evacuado parte del sector de entretenimiento ante avisos de una fuga de gas y que olía a gas.
Varios trabajadores que atendían la fuga de gas advirtieron que habría una explosión en el inmueble y buscaron cubrirse detrás de un vehículo junto con bomberos y policías, dijo Mark McDonald, presidente de la Asociación de Trabajadores del Gas de Nueva Inglaterra.
La mayoría de los lesionados corresponden a ese grupo de personas en tanto que el vehículo que les salvó la vida quedó prácticamente destruido, agregó.
"En verdad es un milagro (que no haya habido muertos) y un ejemplo de nuestras autoridades de seguridad pública, que todos los días se ponen en peligro; vinieron por una llamada de rutina por una fuga de gas, pero adoptaron las medidas adecuadas", dijo el jefe estatal de bomberos, Stephen Coan. "Gracias a dios que lo hicieron", apuntó.
Las autoridades también quedaron asombradas de que la explosión ocurriera a las 5:30 de la tarde, el día que estaba cerrada la guardería, la cual registró severos daños.
El gobernador adjunto Tim Murray y el alcalde de Springfield, Domenic Sarno, asistían a una ceremonia de encendido de luces de un árbol cuando ocurrió la explosión. Sarno dijo que algunas personas tuvieron la impresión de que la explosión era parte del acto.
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