Autor: Miguel Cruz TejadaNUEVA YORK/Elnuevodiario._ Las autoridades judiciales extraditaron a Nueva York, al puertorriqueño José Victorio Fernández, quien la semana pasada degolló con una puñalada de oreja a oreja a la dominicana Ana Brisela Fernández, quien era su esposa. El victimario huyó tras cometer el homicidio a New Jersey donde fue ubicado, entregándose sin resistencia a las autoridades. La fiscalía de El Bronx solicitó la extradición de inmediato y el sábado el boricua fue entregado a detectives de homicidios del cuartel 44 en ese condado, donde está recluido. Fernández fue procesado ayer lunes por asesinato en segundo grado, posesión criminal de un arma y evadir la justicia.
Las autoridades explicaron que el cadáver de Ana de 55 años de edad, fue encontrado yaciendo en la habitación matrimonial por una vecina, Ana Veras, que llamó al 911 para reportar el crimen.
La pareja residía en el 1130 de la avenida Anderson y el crimen fue perpetrado por el puertorriqueño el domingo de la semana pasada en medio de una discusión de violencia doméstica.
Veras dijo que escuchó desde su apartamento, cuando la víctima le reclamaba al boricua que no la golpeara. La discusión tuvo lugar a eso de las 3:00 de la tarde. La vecina relató que al oír los gritos de la víctima, llamó a las autoridades.
“Marqué al celular de Ana y al teléfono de la casa, pero él (el asesino) cerró y no contestó”, agregó Veras. Un altar fue improvisado frente al edificio por vecinos, familiares y amigos de la víctima.
Carmen Payano, una amiga de la occisa de hace muchos años, dijo que entre las parejas, cuando se debe tomar una decisión hay que hacerlo. “Si tienen que separarse que lo hagan y cada quien que tome su camino, porque perder un alma de Dios así… no es fácil”.
La última vez que vieron a la dominicana con vida fue el jueves anterior al asesinato. “Casi nunca salía de su casa, por lo que creemos que el marido no tenía motivos para matarla”, dijeron algunas amigas de la víctima que conversaron con este reportero.
El funeral de Brisela se llevará a cabo el sábado entre 3:00 de la tarde y 8:00 de la noche en la Funeraria Ortiz de la calle 190 y avenida Broadway en el Alto Manhattan, según informaron a este reportero allegados a la familia.
El cadáver fue repatriado el domingo a la República Dominicana donde sería sepultado ayer lunes en el cementerio municipal de Santiago de los Caballeros. La víctima era nativa del sector Pueblo Nuevo de esa ciudad.
Un funeral se llevó a cabo el sábado en la Funeraria Ortiz de la calle 193 y avenida Broadway en el Alto Manhattan.
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