Las aeronaves, una de la compañía estadounidense American Airlines procedente de San Francisco y otra de la finlandesa Finair, con origen en Helsinki, han sido apartadas de las terminales del aeropuerto y están siendo registradas por agentes federales.
Ninguno de los dos pilotos notificó una emergencia a la torre de control, según indicó la cadena NBC, que explicó que los agentes actuaron por supuestas amenazas de secuestro.
Sin embargo, la cadena ABC apuntó que la actuación en el Boeing 767 de American Airlines se debería a una amenaza de bomba, mientras que no precisó el origen de la amenaza sobre el avión de Finair.
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