HUNTSVILLE, Texas, EE.UU. /AP-Texas ejecutó el miércoles a un ex guardia hispano de seguridad de Houston por haber causado la muerte a balazos de cuatro personas, incluida su ex novia y los dos hijos pequeños de ella en octubre de 1996. Virgil Martínez, de 41 años, fue condenado a la pena capital por los homicidios de Verónica Fuentes, de 27 años, de sus hijos Joshua y Casandra, de cinco y tres años de edad respectivamente, y del vecino John Gómez, de 18 años, en Alvin, al sur de Houston. Martínez fue el cuarto reo de Texas ejecutado este año y el primero de dos en noches consecutivas esta semana en el estado más activo del país en esta materia. Martínez emitió un mensaje final divagante en el que dijo a sus familiares que los amaba, y luego culpó de tres de los homicidios a Gómez, quien sobrevivió el tiempo suficiente para decir a la policía que el ex novio de Fuentes fue quien les disparó. "Sé lo que les han dicho, y todo es una mentira", señaló el reo, mirando hacia los familiares de las víctimas a través de una ventana. "John Gómez mató a sus niños y hermana", señaló. El estaba relatando los asesinatos cuando directivos de la prisión, quienes advierten a los reos que sólo tienen un par de minutos para comentarios finales, comenzaron a inyectar los fármacos letales. Nueve minutos después, a las 6:50 p.m., Martínez fue declarado muerto. Jerry Fuentes, cuya familia fue asesinada, miró la ejecución y leyó un comunicado preparado, diciendo que el día que sepultó a sus seres queridos juró ver que Martínez fuera castigado. "Las ruedas de la justicia finalmente giraron", señaló. "Aunque el sistema tiene fallos, se sirvió la justicia", agregó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario