Fuente:Almomento.netLa agrupación New Yorkers for Constitutional Freedoms (NYCF) introdujo la demanda ante la Corte Suprema del condado de Livingston
NUEVA YORK.-Una agrupación conservadora neoyorquina presentó el lunes una demanda ante la justicia para frenar los matrimonios homosexuales en el estado de New York, 24 horas después de entrar en vigencia la ley que permite ese tipo de uniones.La agrupación New Yorkers for Constitutional Freedoms (NYCF) introdujo la demanda ante la Corte Suprema del condado de Livingston, indicó una vocera de la organización.
Los reverendos Jason McGuire y Duane Motley y el rabí Nathaniel Leiter firman la demanda en la cual se denuncia que la ley que permite los casamientos homosexuales se adoptó "violando las leyes de New York sobre reuniones abiertas", según un comunicado.
NYCF fue creada en 1982 por un grupo de pastores "preocupados por las libertades religiosas y los valores morales en el Estado de New York".
El Estado de New York se convirtió el 24 de junio en el sexto y más grande del país en autorizar el casamiento entre personas del mismo sexo, tras una ajustada votación en el Senado que puso fin a duras negociaciones entre demócratas y republicanos.
Un mes después de aprobada la ley, New York celebró el domingo los primeros casamientos homosexuales de su historia, en una jornada marcada por un récord de 659 bodas.
New York comenzó a celebrar el domingo por la mañana en un clima de gran algarabía los primeros casamientos homosexuales de su historia, al entrar en vigencia la ley que permite ese tipo de uniones en uno de los estados más poblados de Estados Unidos.
Las primeras bodas tuvieron lugar poco después de las 08H30 locales en los registros civiles de las cinco circunscripciones de la ciudad: Manhattan, Bronx, Staten Island, Queens y Brooklyn.
Nancy Mertzel, una abogada de 48 años, y Yolanda Potasinski, una ejecutiva de 55, encabezaron la larga fila con cientos de parejas que esperaban en la puerta del registro civil de Manhattan.
"Diez, nueva ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno.. ¡Sí!", gritaron triunfales las parejas al abrirse el vallado metálico colocado por la policía en la puerta del edificio del 141 de la calle Worth, en el sur de Manhattan.
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