Dice que como consecuencia de esa sentencia un número indeterminado, pero muy significativo, de dominicanos han sido privados arbitrariamente de su nacionalidad.
“Estas personas han visto violado su derecho a la personalidad jurídica y viven sumidos en una condición de extrema vulnerabilidad” dice el informe preliminar de la CIDH.
Agrega que esa situación afecta de manera desproporcionada a las personas de ascendencia haitiana, frecuentemente identificadas sobre la base del color de su piel, constituyendo una violación al derecho a la igualdad y a la no discriminación.
La comisión estima que la sentencia del TC conlleva a una privación arbitraria de la nacionalidad. “La sentencia tiene un efecto discriminatorio dado que impacta principalmente a personas dominicanas de ascendencia haitiana…afecta desproporcionadamente a personas ya sujetas a múltiples de discriminación, en particular con base en la raza y la pobreza”.
La comisión expresó también su preocupación de que la “intolerancia y el discurso racista cree un ambiente que incremente la vulnerabilidad frente a las personas de descendencia haitiana” y hace un llamado a las autoridades a contribuir decisivamente a la construcción de un clima de tolerancia y respeto, en el cual todas las personas puedan expresar sus pensamientos y opiniones sin miedo a ser agredidas, sancionadas o estigmatizada por ello. Esto último, con relación a comunicadores que criticaron la sentencia y que fueron calificados como traidores a la patria.
La CIDH recomienda que se garantice el derecho a la nacionalidad de las personas que ya tenían ese derecho, bajo el régimen interno vigente entre 1929 y el 2010.
La delegación de la CIDH analizó los casos de 3,994 personas y dijeron que ayer en el encuentro con el presidente Danilo Medina le expresó su preocupación sobre el tema y su interés de buscar una solución a los afectados.
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