Queens – Miguel Mejía Ramos
mató a su esposa por celos y a sus dos hijas porque no tenía asientos
para bebé en la furgoneta en la que escapó, según dijo a los detectives
neoyorquinos que acudieron a Texas a interrogarle.
Según explicó ayer el fiscal de Queens, Richard A. Brown, Mejía Ramos (28) confesó que apuñaló a su esposa Deisy García (21) la noche del sábado 18 en su apartamento en el referido condado, tras enloquecer al ver en el teléfono celular una foto de ella con otro hombre en su página de Facebook.
Posteriormente, abrazó y besó a sus hijas Daniela (2) y Jozelín (1) antes de apuñalarlas repetidamente. Después, trató inútilmente de suicidarse apuñalándose en pecho y estomago y luego ahorcándose. Cuando le preguntaron por qué había matado a las niñas, dijo: "Iba a llevármelas conmigo, pero el carro no tenía sillas".
En cuanto a su opinión sobre lo que había hecho, respondió: "Dios y cárcel".
El sospechoso compareció ayer por primera vez ante la justicia de Nueva York, donde el juez Ernest Hart de la Corte Criminal de Queens ordenó su encarcelación sin derecho a fianza. A petición del abogado defensor Michael Anastasion, el juez también ordenó que se le proporcionara atención médica por las heridas que se ocasionó, y que se le mantuviera en vigilancia por riesgo de suicidio. La próxima comparecencia será el 14 de febrero.
El indocumentado mexicano se enfrenta a múltiples cargos de asesinato: tres en segundo grado, seis en primer grado y cinco de posesión criminal de un arma en 4º grado. De ser declarado culpable, se enfrenta a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Brown, se reunió con los familiares de las víctimas y les informó que no aceptarían un acuerdo de culpabilidad, según declaró en rueda de prensa. Respecto al estatus migratorio del sospechoso, aseguró: "Eso no va a afectar su caso ni el proceso criminal".
En la sala se encontraban la madre, tías y primos de García, acompañados por el cónsul general de Guatemala Oscar Padilla Lam y el abogado de la familia Roger Asmar.
Evelinda Alvarado, tía de Deisy, la describió como "muy alegre, una mujer muy activa, en todo momento muy cariñosa y muy espiritual", y lamentó que "a Miguel le teníamos como de la familia y le habíamos entregado una confianza muy especial".
"Estábamos todos los domingos juntos, siempre compartíamos una cena, todos traíamos diferentes comidas y éramos una familia muy unida", relató Alvarado, que rompió a llorar al mostrar una foto de las víctimas en su celular. Se espera que los restos de las víctimas sean trasladados próximamente para su entierro en Guatemala, de donde la madre era originaria.
Entre otros escalofriantes detalles del crimen que se dieron a conocer ayer, Mejía Ramos explicó a los investigadores que tras cometer los asesinatos se duchó e inició su huida a su país, México, tomando $240 del monedero de Deisy porque "había visto el programa del Discovery Channel 'Casi me salgo con la mía' y sabía que necesitaba dinero en efectivo para que la Policía no le rastreara a través de las tarjetas de crédito".
En lo que no pensó fue en no utilizar su celular, y fue a través de éste que pudieron rastrearlo. El alguacil del condado de Fayette, Texas, le arrestó el lunes en la autopista interestatal 10, apenas a 70 millas de la frontera.
Anteriormente, el acusado había asegurado a los detectives que fue su esposa quien asesinó a las niñas y le atacó a él cuando entró en el cuarto y las encontró muertas. Luego, tras reconocer que estaban en proceso de separarse y que dormían en cuartos separados, asumió la culpa por las muertes......
Según explicó ayer el fiscal de Queens, Richard A. Brown, Mejía Ramos (28) confesó que apuñaló a su esposa Deisy García (21) la noche del sábado 18 en su apartamento en el referido condado, tras enloquecer al ver en el teléfono celular una foto de ella con otro hombre en su página de Facebook.
Posteriormente, abrazó y besó a sus hijas Daniela (2) y Jozelín (1) antes de apuñalarlas repetidamente. Después, trató inútilmente de suicidarse apuñalándose en pecho y estomago y luego ahorcándose. Cuando le preguntaron por qué había matado a las niñas, dijo: "Iba a llevármelas conmigo, pero el carro no tenía sillas".
En cuanto a su opinión sobre lo que había hecho, respondió: "Dios y cárcel".
El sospechoso compareció ayer por primera vez ante la justicia de Nueva York, donde el juez Ernest Hart de la Corte Criminal de Queens ordenó su encarcelación sin derecho a fianza. A petición del abogado defensor Michael Anastasion, el juez también ordenó que se le proporcionara atención médica por las heridas que se ocasionó, y que se le mantuviera en vigilancia por riesgo de suicidio. La próxima comparecencia será el 14 de febrero.
El indocumentado mexicano se enfrenta a múltiples cargos de asesinato: tres en segundo grado, seis en primer grado y cinco de posesión criminal de un arma en 4º grado. De ser declarado culpable, se enfrenta a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Brown, se reunió con los familiares de las víctimas y les informó que no aceptarían un acuerdo de culpabilidad, según declaró en rueda de prensa. Respecto al estatus migratorio del sospechoso, aseguró: "Eso no va a afectar su caso ni el proceso criminal".
En la sala se encontraban la madre, tías y primos de García, acompañados por el cónsul general de Guatemala Oscar Padilla Lam y el abogado de la familia Roger Asmar.
Evelinda Alvarado, tía de Deisy, la describió como "muy alegre, una mujer muy activa, en todo momento muy cariñosa y muy espiritual", y lamentó que "a Miguel le teníamos como de la familia y le habíamos entregado una confianza muy especial".
"Estábamos todos los domingos juntos, siempre compartíamos una cena, todos traíamos diferentes comidas y éramos una familia muy unida", relató Alvarado, que rompió a llorar al mostrar una foto de las víctimas en su celular. Se espera que los restos de las víctimas sean trasladados próximamente para su entierro en Guatemala, de donde la madre era originaria.
Entre otros escalofriantes detalles del crimen que se dieron a conocer ayer, Mejía Ramos explicó a los investigadores que tras cometer los asesinatos se duchó e inició su huida a su país, México, tomando $240 del monedero de Deisy porque "había visto el programa del Discovery Channel 'Casi me salgo con la mía' y sabía que necesitaba dinero en efectivo para que la Policía no le rastreara a través de las tarjetas de crédito".
En lo que no pensó fue en no utilizar su celular, y fue a través de éste que pudieron rastrearlo. El alguacil del condado de Fayette, Texas, le arrestó el lunes en la autopista interestatal 10, apenas a 70 millas de la frontera.
Anteriormente, el acusado había asegurado a los detectives que fue su esposa quien asesinó a las niñas y le atacó a él cuando entró en el cuarto y las encontró muertas. Luego, tras reconocer que estaban en proceso de separarse y que dormían en cuartos separados, asumió la culpa por las muertes......
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