Díaz, de 33 años de edad, disparó contra ambas
dominicanas durante una disputa de violencia doméstica, impactando con
dos balazos a su ex compañero y con uno, que le disparó desde fuera del
apartamento a la suegra.
Fue declarado culpable por la comisión de dos
cargos graves de intento de asesinatos, asalto con un arma peligrosa,
con la intención de cometer un homicidio y un cargo de posesión ilegal
de un arma de fuego.
Los fiscales dijeron que Díaz, después de discutir
con Jessica, la obligó a arrodillarse en el piso de la vivienda, le
puso el arma en la cabeza, apretó el gatillo, pero la pistola se le
encasquilló.
La fiscalía alegó que el convicto, escapó del
apartamento y fue arrestado en una fiera persecución de la policía y
oficiales del Servicio de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshalls),
que lo capturaron en El Bronx (Nueva York) días después.
El sentenciado y Jessica tienen un hijo y ella lo había dejado semanas antes del intento de asesinarla.
“El acusado se negó a aceptar que novia quería
alejarse de su comportamiento violento y controlador”, dijo el
Procurador General del estado de Rhode Island en un comunicado.
“La joven hizo lo correcto al buscar protección y
seguridad con su familia, pero el desató una violencia indescriptible
causando miedo”, añade el fiscal.
“Somos muy afortunados, de que estas víctimas, no
fueron más gravemente heridas y este acusado, con razón, pasará un
tiempo significativo encarcelado por sus acciones violentas”, concluye
el comunicado de la fiscalía.
Por Miguel Cruz Tejada/Elnuevodiario.com
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