HIGÜEY.- Como se hubiesen transportado en el tiempo y en el espacio hasta el Viejo Oeste norteamericano, dos hombres dominicanos se fueron a un duelo en la madrugada de este lunes en Higüey, al que ninguno de los dos sobrevivió.
Los muertos son Miguel Ángel Devers, presidente de la compañía de taxis TRINITAXI y el carnicero Francisco Sala, de 52 y 48 años de edad, respectivamente.
Se fueron a los tiros frente al chimichurri Keisi, ubicado en la calle Huáscar Tejeda, del sector San José de esta ciudad.
Según versiones recogidas de testigos, Devers se ncontraba en estado de embriaguez y discutió con Sala porque le había estacionado la motocicleta en que viajaba cerca de su jeepeta.
Tras la discusión ambos extrajeron sus armas y se dispararon hasta morir.
Los cadáveres fueron enviados al instituto de Patología Forense de San Pedro de Macorís.
La comunidad de Higüey ha mostrado consternación por la muerte de los dos hombres a quienes definen como “muy trabajadores”.
Sin embargo, en el drama se perfilan otras motivaciones ya que el mayor Eddy Pinales, del Departamento de Investigaciones Criminales de la Policía Nacional, no descartó que el hecho se produjera por problemas pasionales.
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