WASHINGTON./EFE- El presidente de EEUU, Barack Obama, firmó ayer su primera ley desde que asumió el cargo, la de Equidad Salarial, en un emotivo acto en el que participó Lilly Ledbetter, la trabajadora que, con su denuncia, provocó el cambio de la legislación nacional.
Obama firmó la ley, que lleva el nombre de la trabajadora, ante las cámaras de televisión, en directo, y acompañado por su vicepresidente, Joseph Biden, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y por la propia Ledbetter, que se emocionó al recibir los aplausos de los asistentes.
Ledbetter fue supervisora de la empresa de neumáticos Goodyear Tire and Rubber Company en Gadsden, Alabama, y poco antes de jubilarse se enteró de que, durante 15 años, la empresa le pagó 40% menos que a los hombres por el mismo tipo de trabajo.
Por esta razón, presentó una demanda y la ganó, pero el Tribunal Supremo de EE.UU. posteriormente la rechazó, en un dictamen de 5-4, en el que argumentó que la mujer tardó mucho tiempo en presentar la demanda. Según el Tribunal Supremo, la mujer debía haber presentado la demanda en un plazo de 180 días desde el primer cheque “discriminatorio” que recibió.
Discrimen a las mujeres Sin embargo, su denuncia puso de relieve la discriminación que sufren muchas mujeres, y provocó un movimiento que acabó con la aprobación de la legislación de igualdad salarial, que se ha denominado “Acta Lilly Ledbetter de Restablecimiento del Pago Justo”.
“Con la firma de esta ley, estamos defendiendo uno de los primeros principios de esta nación; que todos somos iguales y que tenemos derecho a perseguir nuestra propia versión de la felicidad”, dijo el presidente Obama minutos antes de estampar su firma. El mandatario tuvo palabras de elogio para Ledbetter, una mujer que “trabajó duro y bien” y que, sin embargo, obtuvo una remuneración menor que sus compañeros masculinos.
BONOS DE BANQUEROS SON “UNA VERGÜENZA”El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, arremetió ayer con inusitada dureza contra los directivos de algunas de las entidades financieras del país por adjudicarse bonus multimillonarios al mismo tiempo que piden un salvavidas con dinero público.
“Es vergonzoso”, afirmó Obama en la Casa Blanca después de reunirse con su vicepresidente, Joe Biden, y su secretario del Tesoro, Timothy Geithner. Según la oficina del controlador del estado de Nueva York, los dirigentes de las entidades financieras de Wall Street concedieron 18,400 millones de dólares en bonos a sus empleados en 2008. La cifra representa un descenso del 44 por ciento respecto al año anterior, pero para Obama sigue siendo desmesurada.
“Eso es el colmo de la irresponsabilidad”, sentenció visiblemente molesto. Obama pidió a las entidades de Wall Street que están pidiendo ayuda “que muestren algo de contención,...”
No hay comentarios:
Publicar un comentario