SANTIAGO.-
Una mujer y sus dos hijas de tres y cinco años de edad, en el día de
ayer, iban a ser quemadas por el exesposo de la señora, quien las amarró
a un tanque de gas licuado de petróleo, en una acción criminal que pudo
haber degenerado en una tragedia en el barrio Pekín, al sur de esta
ciudad.
Vecinos de Elizabeth Altagracia López de 25 años
de edad, quien reside en una vivienda de la calle Maguana de Pekín,
cuentan que el anterior compañero de la misma, señor Junio Liriano
Valerio de 32 años de edad, primero la amarró al tanque, y lo mismo hizo
con las menores, que son sus hijas, para luego incendiar la casa, lo
que no logró materializar por la afortunada intervención de un mayor de
la policía, conocido en la zona por el apellido Beriguete.
Según los lugareños, la pareja tiene un tiempo
separada y que al parecer el hombre insiste para que la mujer regrese
con él, a lo que se resiste la dama, por los malos tratos que recibe
junto a sus pequeñas.
Decenas de curiosos, algunos portando palos,
piedras y armas blanca, por poco hacen justicia en contra del agresor,
de no aparecer a tiempo el oficial, que todo hace indicar fue avisado
del incidente que se registraba.
Autor: Hilarión Isalguéz/Elnuevodiario
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