El sacerdote mexicano, reportado como desaparecido el viernes pasado, fue encontrado calcinado en el municipio de Nopalucan, en el central estado de Puebla, informaron fuentes oficiales.
El cuerpo del párroco de Cuyoaco fue hallado en avanzado estado de descomposición por campesinos de Nopalucan que alertaron a las autoridades locales.
La fiscalía de Puebla indicó en un comunicado que el cadáver “presentaba lesiones en cráneo y diversas quemaduras” y precisó que ya realiza pruebas de genética para lograr su plena identificación.
La institución señaló que desde que recibió el primer reporte de “no localización” de Pliego de Jesús activó su búsqueda y los peritos realizaron una “inspección en el curato del municipio, donde se recabaron diversos indicios”.
Tras una reunión con el comité parroquial, el sacerdote recibió la visita de tres sujetos, quienes se identificaron como exseminaristas.
Su hermano, Javier Pliego de Jesús, dijo a Efe que dos de ellos entraron con el cura a la casa y en horas de la madrugada lo sacaron de la parroquia de Nuestra Señora de la Natividad.
Allí fueron halladas botellas de licor, colillas de cigarro y restos de sangre, contó el sacristán Luis Ángel Peña.
Originario del central estado de Morelos, Erasto Pliego de Jesús, de 55 años, llevaba tres años a cargo de Nuestra Señora de la Natividad.
En un comunicado, la Arquidiócesis de Puebla lamentó “profundamente que un sacerdote cuya vida estaba consagrada a Dios y al servicio de los demás haya sido víctima de la violencia”.
Diez asesinatos
En abril pasado, la unidad de investigación del Centro Católico Multimedial (CCM) alertó sobre el aumento de los ataques contra sacerdotes en el mandato del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que inició en diciembre de 2012, al reportar diez asesinados y dos desaparecidos.
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