Nueva York/EDLP. - Adalberto Ariel Guzmán, alias el “Gringo”, miembro de la temida pandilla La Mara Salvatrucha MS-13, fue condenado este viernes a cumplir dos cadenas perpetuas consecutivas por el asesinato en el 2010 de la joven Vanessa Argueta (19) y el hijo de esta Diego Torres (2), en un suceso que conmocionó a la comunidad de Central Islip, en Long Island.
La condena se dio a conocer en una audiencia en la Corte Federal de Central Islip, en la cual el juez le impuso a Guzmán otros 35 años extras en prisión, a parte de las dos cadenas perpetuas, por diferentes crímenes relacionados con la planeación del asesinato de la madre e hijo el 5 de febrero del 2010.
El criminal había sido declarado culpable en septiembre del 2013 luego de tres semanas de juicio, en el que enfrentó dos cargos criminales de asesinato en primer grado, uno de extorsión, otro de conspiración para cometer un asesinato y uno de uso ilegal de arma de fuego.
“La MS-13 se ha hecho notoria por su cruda violencia en las calle de Long Island. Sin embargo, el asesinato estilo ejecución de una madre y su pequeño hijo es, incluso para la MS-13, uno de los más insensibles crímenes a sangre fría”, dijo la Fiscal de EEUU para el Distrito Oeste de Nueva York, Loretta E. Lynch.
Guzmán, junto a otros miembros de la pandilla, planearon la captura de la madre y su hijo a quienes llevaron a un bosque donde les dispararon estilo ejecución en la cabeza y el pecho, porque supuestamente la mujer había “irrespetando” a la MS-13.
Y aunque los criminales se escaparon a El Salvador, fueron arrestados posteriormente cuando intentaron reingresar a EEUU. Otro fue detenido en Nicaragua y está a la espera de ser extraditado.
La condena se dio a conocer en una audiencia en la Corte Federal de Central Islip, en la cual el juez le impuso a Guzmán otros 35 años extras en prisión, a parte de las dos cadenas perpetuas, por diferentes crímenes relacionados con la planeación del asesinato de la madre e hijo el 5 de febrero del 2010.
El criminal había sido declarado culpable en septiembre del 2013 luego de tres semanas de juicio, en el que enfrentó dos cargos criminales de asesinato en primer grado, uno de extorsión, otro de conspiración para cometer un asesinato y uno de uso ilegal de arma de fuego.
“La MS-13 se ha hecho notoria por su cruda violencia en las calle de Long Island. Sin embargo, el asesinato estilo ejecución de una madre y su pequeño hijo es, incluso para la MS-13, uno de los más insensibles crímenes a sangre fría”, dijo la Fiscal de EEUU para el Distrito Oeste de Nueva York, Loretta E. Lynch.
Guzmán, junto a otros miembros de la pandilla, planearon la captura de la madre y su hijo a quienes llevaron a un bosque donde les dispararon estilo ejecución en la cabeza y el pecho, porque supuestamente la mujer había “irrespetando” a la MS-13.
Y aunque los criminales se escaparon a El Salvador, fueron arrestados posteriormente cuando intentaron reingresar a EEUU. Otro fue detenido en Nicaragua y está a la espera de ser extraditado.
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