martes, 12 de julio de 2011

Critican a Michelle Obama por “un pecadito”.

EDLP
Servicios combinados - “En casa de herrero, chuchillo de palo” dice el refrán. Y ese parece ser el caso de la primera dama de EE.UU., Michelle Obama, quien es una ferviente defensora de la sana alimentación, pero ayer se comió una hamburguesa alta en grasa y calorías.
Michelle Obama, quien impulsa la campaña “Let’s Move! (Vamos a movernos), que busca eliminar la obesidad en los niños, asistió ayer a la apertura de un nuevo restaurante en Washington D.C., “Shake Shack”, donde ordenó un “ShackBurger”, una hamburguesa que tiene 1,556 calorías, de acuerdo con la página de internet del restaurante.
Y, aunque la Primera Dama tiene todo el derecho de darse sus gustos de vez en cuando, su presencia en “Shake Shack” ha levantado una ola de críticas por dar una imagen contraria a lo que ella impulsa en la juventud estadounidense: una sana alimentación para bajar de peso o mantenerse en buena forma.
Sin embargo, a pesar de que la hamburguesa que consumió la primera dama contiene casi el total de caloría recomendados para todo un día, los expertos nutricionistas aseguran que el asunto se está sacando de perspectiva, asegurando que Obama ha logrado mantenerse en excelente forma al mantener un peso constante y al hacer ejercicio regularmente, por lo que darse un “placer” de vez en cuando no está mal, ya que eso es lo que a mucha gente le ayuda a mantenerse en régimen.

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