ORLANDO, Florida (AP).— Una madre absuelta del cargo de asesinar a su pequeña hija fue liberada de la cárcel en los primeros minutos de este domingo para enfrentarse a un futuro incierto después de casi tres años tras las rejas.
Casey Anthony abandonó la cárcel del condado de Orange, en Orlando, tan sólo 12 días después de su absolución en una camioneta tipo SUV acompañada de su abogado José Baez.
Uno de los abogados de la mujer, Cheney Mason, dijo el viernes que Anthony tenía miedo de salir de la cárcel, debido a las numerosas amenazas contra su vida y el desprecio de muchas personas que creen que ella tuvo algo que ver con la muerte de su hija Caylee, de 2 años.
A principios de este mes Anthony, de 25 años, fue absuelta del cargo de asesinato premeditado en la muerte de Caylee. Fue declarada culpable de cuatro cargos de mentirle a los policías, pero con el tiempo que ya pasó detenida y por su buen comportamiento tras las rejas no tendrá que cumplir su sentencia de cuatro años de prisión.
Otro abogado, Charles Greene, dijo el viernes que Anthony está en una situación "emocionalmente inestable" y que necesita "un poco de espacio para respirar" después del agotador juicio de dos meses.
Ese "poco de espacio", sin embargo, podría ser difícil de conseguir dado que los medios de comunicación estarán siguiendo los primeros pasos de Anthony tras recuperar la libertad.
Después del veredicto, en las redes sociales como Facebook y Twitter se respira un clima de hostilidad hacia Anthony.
Su equipo defensor dijo el viernes que había recibido una amenaza de muerte por correo electrónico, con una foto manipulada que mostraba a la mujer con un agujero de bala en la frente.
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