CRISTINA LOBOGUERRERO/EDLP SCRANTON, PENSILVANIA – "Lo vimos venir, era bajito, ancho, hispano nos dijo algo en español, le dijimos que se fuera para México, empezamos a seguirlo y luego a golpearlo", relató Brian Scully, de 19 años, uno de jóvenes que estuvo involucrado en el incidente que provocó la muerte del mexicano Luis Ramírez.
Ese fue el testimonio clave que se escuchó en el segundo día del juicio federal que se le sigue a dos jóvenes en conexión con la muerte de Ramírez, ocurrida en julio del 2008 en Shenandoah, Pensilvania
Scully admitió haber golpeado a Ramírez, sin embargo aclaró: "Fue el golpe de Brandon Piekarsky el que dejó temblando a Ramírez en el piso".
"El lucía pequeño, ancho, hispano, el dijo algo en español que no entendimos le empezamos a gritar vete a México, Mojado, Mexicano hijo de p…." dijo Scully. "Después que le pegamos corrimos, pensábamos que estaba muerto, me devolví y les dije está vivo porque está respirando", anotó.
Derrick Donchak, 20 y Brandon Piekarsky, 18, enfrentan cargos federales por un crimen de odio, en un proceso que se lleva a cabo en la corte federal del Scranton en Pensilvania.
Por su parte Ben Lawson, otro de los jóvenes que admitió haber participado en el incidente la noche del 12 de julio del 2008 y que no ha sido acusado por ningún cargo, dijo que usualmente "les decíamos insultos de tipo racial a los hispanos".
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