Nueva York/Catalina Jaramillo/edlp — A pesar de que la Iglesia Católica y el Papa Benedicto XVI pasan por un momento difícil debido al abuso de menores por parte de sacerdotes, la fe no pareció verse afectada ayer en la iglesia Santa Bárbara en Bushwick.
Alrededor de 800 personas acompañaron a un grupo de 35 fieles que cada año hace una interpretación de las doce estaciones por las cuales pasó Cristo antes de morir en la cruz. Con luces, disfraces y amplificación; niños, jóvenes, adultos y ancianos recordaron cada momento del Vía Crucis.
“Sinceramente el Papa que está ahora no está haciendo las cosas como las hacía el Papa que murió”, dijo Analina Carrión, mexicana de 33 años que asistió con toda su familia. “No porque algunos sacerdotes son malos, todos van a ser malos”, agregó.
El sentimiento general de los creyentes de Bushwick era que si bien no están de acuerdo con lo que está sucediendo, “todos somos humanos y por lo tanto pecadores”. La fe permanece intacta.
Dioni Núñez, dominicano de 42 años, es el director del grupo dramático Santa Bárbara que se reúne hace veinte años para hacer este Vía Crucis. Hace 12 años Núñez hace de Jesús de Nazareth. Su hija de seis años cree que él es Jesús, comentó.
“Trata uno en el Vía Crucis de recordar todo ese sufrimiento que vivió Jesús por nosotros. El momento que más me impacta es cuando Jesús está orando en el Huerto de Getsemaní. Es tan bonito recibir esas tentaciones de Satanás y saber rechazarlas”, explicó Núñez, que dijo que este era el día más especial del año para él.
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