RIVERHEAD, Log Island/Cándida Portugués/EDLP — Jeffrey Conroy, de 19 años, testificó ayer que no apuñaló a Marcelo Lucero, 37, sino que fue Christopher Overton, 18, y le pidió que le cubriera porque estaba pendiente de sentencia por robo con allanamiento en el que había muerto un hombre y no podía meterse en líos.
Conroy había confesado que apuñaló a Lucero el ocho de noviembre del 2008 cuando le atacó con otros seis adolescentes que “salieron a pegar hispanos”.
Con el testimonio de Conroy comenzó la defensa su turno de testigos, una comparecencia que paralizó el juicio el miércoles mientras la fiscal Megan O´Donnell, William Keahon por la defensa y el juez Robert W. Doyle se reunían a puerta cerrada.
Ayer el juez instruyó al jurado que el testimonio de Conroy no podían considerarlo como prueba sino como información acerca del estado de ánimo que tenía el día del suceso.
Preguntado por Keahon, Conroy indicó que al comienzo de la noche fue a su casa con su amigo José Pacheco y Chris Overton al que sólo conocía de vista, para comer unos sándwiches y cuando le preguntó por qué no le había visto por la escuela, Overton respondió: “El año pasado me vi envuelto en un robo con allanamiento de morada y un hombre murió a consecuencia de los disparos”.
Conroy declaró que no participó en los ataques, y que estaba en el auto de Jordan Dasch porque este, de camino a Patchogue, iba a dejarle en casa de una amiga. “Le dije que se había pasado y me respondió que me dejarían a la vuelta”.
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