Santo Domingo.- La ola de violencia, que se mantiene como una constante en los últimos siete años, provocó cerca de 1,800 muertes en todo el país durante el año 2009, en hechos como ajustes de cuentas por negocios de drogas, riñas, violencia de género y pleitos entre pandillas, en primer término y, en un segundo orden, en asaltos a mano armada en que los delincuentes mataron a sus víctimas.
Esta cifra general de muertes incluye 287 homicidios cometidos por agentes de la Policía desde enero hasta mediados de diciembre, en presuntas “acciones legales”, según las estadísticas de la propia institución del orden y de la Procuraduría General de la República (PGR), muertes que aunque en muchos casos ocurrieron en forma sumaria, escandalosa y con desprecio a la vida humana, dismuyeron 19% con relación al 2008.
El año 2008 concluyó con 11 muertos en sus últimos cuatro días a manos de agentes policiales y el 2009 comenzó con 19 en sus primeras ocho jornadas, para un total de 29 en 12 días, a razón de 2.4 por día, casi duplicando el 1.3 que se estima prevaleció durante el año previo.
El mismo día del Año Nuevo, en este 2009, se inició la investigación de los hechos sangrientos del anterior 30 de diciembre, cuando seis hombres murieron por balas de agentes policiales, cinco de ellos ejecutados en la avenida Mirador del Sur y otro en Villa Mella.
Siguieron otros muertos tanto el día 2 de enero, en Puerto Plata y Cotuí, como el día siguiente en La Romana e Higu¨ey, y el 8 con dos en Santiago y dos en la capital y Bonao.
Las últimas estadísticas registradas en el sitio de internet de la PGR indican que entre enero y septiembre del 2009 los muertos en “acción legal” de la Policía sumaban 213 para un promedio de 30.3 por mes.
Hasta ayer la PGR no había presentado las estadísticas del último trimestre, pero los conteos periodísticos indican que el promedio en el año disminuyó casi 20%.
Las muertes a manos de la Policía en los primeros 9 meses del 2008 superaron en 146 las del mismo período del 2007 para un alarmante incremento del 74 por ciento. Entonces, la tasa de muertes violentas se disparó a 25.3 por cada 100 mil habitantes, incremento del cinco%en relación a la tasa de 20.5 en el año anterior.
Los homicidios, que no incluyen los policiales, habían crecido sólo en 13 por ciento, pasando de 1,290 a 1,464 en los mismos períodos.
La mayor tasa de muertes violentas se había registrado en el 2004 con 25 por cada cien mil habitantes.
Política de Estado
Aunque la actual jefatura policial, del mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, ha establecido un nuevo récord de muertes de delincuentes, la práctica, según la opinión de expertos, ya puede considerarse como política oficial, porque viene en incremento desde la década del 90 y hay muestras de apoyo de importantes segmentos de la población y de representantes de la sociedad civil.
En múltiples casos las víctimas del exterminio oficial han correspondido a desobediencias con agentes policiales; en algunos se ha tratado de delincuentes que no han cumplido cuotas comprometidas con uniformados y en otras por enfrentamientos con reincidentes.
Los meses de enero, febrero, abril, julio y septiembre fueron muy violentos, pues en cada uno de esos períodos cayeron abatidos por patrullas policiales 36, 38, 47 y 45 civiles respectivamente.
En varios hechos fueron muertos grupos de cinco, cuatro y tres personas, como los casos de La Ciénega de Manoguayabo, del Kilómetro 22 de la autopista Duarte Vieja, la avenida España y Cristo Rey.
Policías caídos
En medio de la violencia y el combate de la delincuencia han caído abatidos 47 agentes policiales en enfrentamientos con delincuentes, sin incluir los casos en que han resultado muertos en hechos delincuenciales y otras circunstancias cuyos motivos no han sido aclarados por los investigadores.
El pasado domingo 14 de diciembre fue abatido a tiros en Villa Mella, de Santo Domingo Norte, por vendedores de drogas, el cabo policial Hannel Francisco Martínez. Fue el número 47 entre los policías muertos de este año 2009, según cifras de la Policía.
MENOS VIOLENCIA A LA MUJER Y FEMINICIDIOS
La violencia conyugal, que venía aumentando en los últimos cinco años, cayó en 32% durante el 2009 con relación al año anterior, cuando 102 mujeres fueron muertas por sus compañeros, frente a 70 femenicidios en el año que transcurre.
Las estadísticas registran un aumento de las denuncias contra la violencia intrafamiliar ante el ministerio público, lo que a juicio de juristas y activistas femeninas ha contribuido con la reducción de las muertes.
Como despidiendo el año, una tragedia conmovió ayer la comunidad Villa Linda, de Bonao, donde un empleado doméstico mató a Anmarys Altagracia Peña Caba, de 31 años, cuyo esposo vive en Estados Unidos, y su hijo Omar Fermín Peña, de apenas siete años. La política de protección familiar y de asistencia de las víctimas en todo el país ha comenzado a dar sus frutos, dijo la magistrada Roxanna Reyes.
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