Nueva York/Manuel Avendaño/EDLP — Trece ex empleados que trabajaban como meseros desde hace 37 años en el antiguo estadio de los Yankees demandaron ayer a la empresa por discriminación, tras haberlos dejado sin empleo en las nuevas instalaciones.
Los trabajadores, que pasan los 70 años y son en su mayoría hispanos, declararon a este diario haber sido engañados por la institución diciéndoles –en octubre del año pasado— que en el nuevo estadio no necesitaría de sus servicios porque no brindarían atención de restaurante.
“Luego descubrimos –en marzo del 2009— que no sólo habría un restaurante, sino dos”, dijo el cubano Pedro Luis Valdés, quien fue mozo de los Yankees por más de tres décadas. “Llenamos solicitudes y nos hicieron todas las pruebas, pero nunca nos llamaron. Esto nos ha afectado por todos lados”, agregó Valdés.
Los hombres sienten que los Yankees se libraron de ellos para luego contratar a meseros más jóvenes y con remuneraciones más bajas para el nuevo estadio, dijo Harry Hertzberg, abogado de los trabajadores.
La demanda –presentada en la Corte Suprema de El Bronx— es contra los Yankees y las empresas anexas “Legends Hospitality, LLC” y “Legends Hospitality Management, LLC”.
“Es increíble que los Yankees de Nueva York despidan a hombres leales que han sido devotos a sus trabajos”, declaró Hertzberg al anunciar la demanda por un millón de dólares. “Es un día triste para El Bronx y una mancha para la reputación y la tradición yankee”, agregó el abogado. “Esta no es la forma en que debe actuar un campeón de béisbol”, acotó.
Para el puertorriqueño Luis Lugo no sólo se trata de un trabajo sino “del hábito de toda una vida compartiendo y disfrutando con los colegas”.
Los trabajadores, que pasan los 70 años y son en su mayoría hispanos, declararon a este diario haber sido engañados por la institución diciéndoles –en octubre del año pasado— que en el nuevo estadio no necesitaría de sus servicios porque no brindarían atención de restaurante.
“Luego descubrimos –en marzo del 2009— que no sólo habría un restaurante, sino dos”, dijo el cubano Pedro Luis Valdés, quien fue mozo de los Yankees por más de tres décadas. “Llenamos solicitudes y nos hicieron todas las pruebas, pero nunca nos llamaron. Esto nos ha afectado por todos lados”, agregó Valdés.
Los hombres sienten que los Yankees se libraron de ellos para luego contratar a meseros más jóvenes y con remuneraciones más bajas para el nuevo estadio, dijo Harry Hertzberg, abogado de los trabajadores.
La demanda –presentada en la Corte Suprema de El Bronx— es contra los Yankees y las empresas anexas “Legends Hospitality, LLC” y “Legends Hospitality Management, LLC”.
“Es increíble que los Yankees de Nueva York despidan a hombres leales que han sido devotos a sus trabajos”, declaró Hertzberg al anunciar la demanda por un millón de dólares. “Es un día triste para El Bronx y una mancha para la reputación y la tradición yankee”, agregó el abogado. “Esta no es la forma en que debe actuar un campeón de béisbol”, acotó.
Para el puertorriqueño Luis Lugo no sólo se trata de un trabajo sino “del hábito de toda una vida compartiendo y disfrutando con los colegas”.
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