El jefe de la oficina de campo en Nueva York de la DEA, agente especial John Gilbridge, dijo en rueda de prensa que los acusados también distribuían el sicotrópico en el estado de Nueva Jersey.
La droga era escondida en los peluches y en etiquetas que los imputados ponían en cajas que identificaban los cargamentos como Barack Obama, Gripe Porcina y Crimen
Alba distribuía entre 15 y 20 kilos de estupefacientes cada semana.
Los allanamientos fueron hechos en cinco direcciones y otros 12 sospechosos fueron arrestados junto con Alba. La heroína provenía de América del Sur, dice el informe.
La investigación llevó cinco meses apoyadacon en agentes encubiertos que infiltraron la organización, a la que DEA considera como una de las más poderosas de los últimos años.
Además del cargo de narcotráfico, los sospechosos están acusados de conspiración, posesión de una sustancia controlada y de artículos para procesar drogas.
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