Bogotá/EFE — El dirigente sindical, Rafael Antonio Sepúlveda fue asesinado a tiros por un sicario cerca de su casa, ubicada en un populoso sector de la ciudad de Cúcuta (noreste), informó ayer la Asociación Nacional de Trabajadores Hospitalarios de Colombia (Anthoc), a la que pertenecía.
El presidente regional de este sindicato, Aricides Hernández, señaló que su compañero fue muerto la noche del sábado cuando llegaba a su vivienda.
“Cerca de su residencia fue muerto nuestro compañero, dirigente sindical de los empleados públicos y activista de Anthoc de Norte de Santander”, dijo Hernández.
Sepúlveda llevaba 18 años vinculado a un hospital de Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, y en la actualidad era dirigente de ese sindicato del sector sanitario.
Hernández recordó que en esa región han sido asesinados en los últimos dos años un total de siete dirigentes sindicales y actualmente hay 30 de ellos amenazados.
El informe anual de la Confederación Sindical Internacional (CSI) señaló recientemente que Colombia continuó siendo en 2008 el país más peligroso para desarrollar una actividad de defensa de los trabajadores, ya que, de los 76 sindicalistas asesinados en todo el mundo durante ese año, 49 eran colombianos.
Esta cifra supera en diez la del año anterior, pese a que en todo el mundo el número total de muertes en este sector disminuyó respecto a 2007, cuando se registraron 91 asesinatos.
Pese al alto número de muertes de sindicalistas colombianos, el texto denunció que la violencia contra las organizaciones de trabajadores y sus miembros queda “impune”, como consecuencia de unas “sentencias condenatorias ínfimas".
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